El 26 de junio de 2002 distintas fuerzas represivas del Estado bajo el mandato de Eduardo Duhalde, se apostaron en el Puente Pueyrredón. El objetivo era impedir el corte que se llevaría a cabo por distintas organizaciones populares en lucha por trabajo digno y mejores condiciones de vida. La movilización avanzo y con ella se desato una brutal represión. A unos pocos metros del Puente, dentro de la Estación de Avellaneda, asesinan a Maximiliano Kosteki y unos minutos después cae acribillado Dario Santillán, quien se arrodillo a su lado cubriéndo al compañero caído y levantando la mano para que dejen de disparar, dando muestra de la solidaridad de lxs de abajo y de dignidad piquetera.
En esos tiempos la movilización popular, las formas de organización asamblearia y la democracia directa venían en crecimiento, con el estallido de las jornadas del 19 y 20 de diciembre 2001 como antecedente. Allí la clase obrera y el conjunto del pueblo salieron a las calles para decir basta a la explotación, la pobreza y la represión del gobierno de la Alianza, con De La Rua como presidente. Estas jornadas dejaron el saldo de más de 30 compañeros/as asesinados/as.
Dario y Maxi son parte de esas jornadas. Parte del movimiento piquetero que se alzo en lucha durante la década menemista, peleando contra el hambre y la desocupación. Dario y Maxi son la herencia viva de una juventud que sigue arremetiendo con la fuerza de la historia, esa historia que no mancillaran los de arriba, que se construyen a fuerza del aparato de un Estado que asesina y encarcela a los/as que luchan.
A once años de la masacre de Avellaneda, solo los autores materiales fueron llevados a juicio: 8 policías, entre ellos, Acosta y Fanchiotti, ambos fueron condenados a prisión perpetua aunque gozan de beneficios. Pero existe un probado plan criminal por parte del gobierno duhaldista, y estos autores intelectuales continúan impunes. Esta impunidad es sostenida por el gobierno kirchnerista, quienes prometieron en su primer año de gobierno investigar a fondo la masacre de Avellaneda, cosa que en los hechos jamás se materializo. Dario y Maxi no caben en su “década ganada”, pero sí Anibal Fernandez, funcionario duhaldista que formó parte del plan represivo del 26 de junio de 2002.
Es nuestra tarea multiplicar los ejemplos de Maxi y Darío, a través de la organización y la lucha desde abajo, mantener viva la fuerza por transformar la sociedad que nos imponen unos pocos poderosos donde reina el hambre y la desigualdad, para construir un mundo diferente sin explotados/as ni explotadores/as.
A 11 años de la Masacre en Puente Pueyrredón, decimos:
¡NO OLVIDAMOS, NO PERDONAMOS, NO NOS RECONCILIAMOS CON EL PASADO!
¡JUICIO Y CASTIGO A LOS RESPONSABLES POLÍTICOS Y MATERIALES DE LA MASACRE DE AVELLANEDA!
¡CARCEL YA A DUHALDE, SOLÁ, FERNANDEZ, VANOSSI, JJ ALVAREZ!
¡BASTA DE CRIMINALIZAR LA POBREZA Y LA PROTESTA SOCIAL!
¡ABAJO EL PROYECTO X Y LA LEY ANTITERRORISTA! ¡DESMANTELAMIENTO DEL APARATO REPRESIVO DEL ESTADO!
¡BASTA DE ASESINAR A LOS/AS QUE LUCHAN! ¡JUSTICIA PARA LOS COMPAÑEROS/AS DEL INDOAMERICANO, LOS QOM Y ORIGINARIOS ASESINADOS, MARIANO FERREYRA!
¡APARICIÓN CON VIDA DE JULIO LOPEZ, LUCIANO ARRUGA, FACUNDO RIVERA, DANIEL SOLANO Y TODOS/AS LOS DESAPARECIDOS/AS EN DEMOCRACIA!
¡BASTA DE GATILLO FÁCIL! ¡NO ES UN POLICÍA ES TODA LA INSTITUCIÓN! ¡FUERA LA POLICÍA DE NUESTROS BARRIOS!
¡LIBERTAD A LOS/AS PRESOS POLÍTICOS!
A 11 años, luchando y organizandonos por el cambio social, decimos:
DARIO SANTILLÁN, ¡PRESENTE!
MAXIMILIANO KOSTEKI, ¡PRESENTE!
¡AHORA Y SIEMPRE!
¿DONDE NOS VEMOS COMPAÑEROS/AS?, ¡EN LA LUCHA!
Espacio Cultural Alternativo
26 de junio de 2013
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